
Muay Thai | Boxeo Tailandés
El muay thai tiene un origen bélico. Nace el siglo XIII, momento en que la antigua capital, situada en Sukhotai, se encontraba constantemente en guerra contra Birmania y Camboya. Este hecho obligó a los soldados a desarrollar todo tipo de técnicas, tales como el manejo de espadas o el combate cuerpo a cuerpo. El arte marcial se conoce también como el arte de todas las partes, ya que, además de manos y pies, se emplean también codos, rodillas o mentón. Año tras año, el muay thai iba evolucionando en técnica y no fue hasta en 1604 que se consideró un deporte profesional.


Es imposible desligar el budismo de este arte marcial. Todo aquel que decida dedicarse profesionalmente al muay thai deberá hacer una estancia de un mínimo de medio año en un monasterio para instruirse en budismo.
El 17 de marzo 1774 Angwin, el rey de Myanmar, llevó a cabo una gran celebración que incluía combates de boxeo, por los que raptó boxeadores de Tailandia. Entre las personas secuestradas se encontraba Nhai Khanomtom, que venció diez combates seguidos sin descanso. Así fue como le nombraron Padre del Muay y la fecha se convirtió en el día del Muay Thai.
Es imposible desvincular el budismo de este arte marcial. Todo aquel que decida dedicarse profesionalmente al Muay Thai deberá hacer una estancia de un mínimo de medio año en un monasterio para instruirse en budismo. Además, existe toda una espiritualidad alrededor del boxeo tailandés, desde un equipamiento de talismanes hasta unos rituales previos para homenajear al maestro y hacer huir a los espíritus, entre otros.
Hoy en día, las artes marciales se han extendido por todo el mundo y a menudo la gente las confunde o conoce sólo una parte muy superficial. La Federación Mundial del Muay Thai vela por la correcta difusión de este deporte.